Archivo del blog

01 noviembre 2011

COLOMBIA Y PANAMÁ. Historia de una vida compartida

El Dr. Julio Suárez Matiz acaba de poner a la disposición del público este texto que pasa revista a los acontecimientos hitóricos más importantes de la relación entre Colombia y Panamá. Escrito por un colombiano que tiene a Chitré y Panamá como su segunda patria. Recomendamos su lectura, no sólo porque representa un esfuerzo de un hombre de nuestra región, sino por el valor intrínseco que el aporte bibliográfico representa.
PRÓLOGO
El Dr. Julio Vicente Suárez Matiz es un lúcido colombiano que reside desde hace muchos años en la Región de Azuero, zona istmeña que en algún momento también he denominado Región de Cubitá y que cobija a las provincias panameñas de Herrera y Los Santos. En Chitré, la capital provincial herrerana, tiene su residencia y allí, acogiéndose a una merecida jubilación, vive acompañado de Doña Aurora María Reyna Horna, su digna esposa.
Desde que arribó a tierras istmeñas ha pasado mucha agua debajo del puente del Río La Villa, al punto que se puede afirmar que Don Julio ya es otro panameño; pero sin desconocer ni  renunciar a la impronta que ha dejado en su vida la patria de Don Anselmo Vicente Azuero y Plata, ese liberal del decimonono de donde deriva nuestro gentilicio de azuerense.
Mantengo con él una añeja amistad que nos ha permitido intercambiar pareceres y coincidir en los variados eventos que en Chitré y áreas circunvecinas congregan a la población santeña y herrerana. Siempre mesurado y culto, lo encontramos disponible para la buena conversación, respetando opiniones y sosteniendo la suya.
Sé que  el humanista que habita en él le impulsa a proyectarse comunitariamente más allá de sus funciones de galeno. En efecto, Don Julio posee una postura anímica que rebasa el clásico “doctor” que se contenta con sus saberes profesionales. Y en esto se parece a médicos istmeños de la talla del ocueño José María Núñez Quintero y del tableño Sergio González Ruiz, quienes además de las funciones inherentes al cargo que ostentaban, también fueron literatos y cultivaron la pintura o la poesía.
De la pluma del médico cubitano-bogotano poseo algunos aportes bibliográficos. Tales los casos de HISTORIA DE LA MEDICNA EN AZUERO y MIS MEMORIAS. En la primera de las publicaciones encontramos a Suárez Matiz preocupado por la suerte histórica de la medicina en esta sección del país. El lector podrá recorrer en sus páginas los primeros asomos de la medicina regional y seguir con entusiasmo la evolución de la cuestión sanitaria. Sin duda un buen aporte para médicos, enfermeras y todo aquel interesado en comprender que la región es más que paroxismos de carnavales o rivalidades deportivas entre provincias hermanas.
Con el segundo de los libros se proyecta más allá de una autobiografía personal, ya que la narración de sus vicisitudes de joven y adulto nos brinda una acuarela histórica y cultural de dos sociedades que siempre han estado vinculadas: la colombiana y la panameña. Precisamente por la planteado, estoy tentado a pensar que la nueva producción del insigne amigo es la culminación de un proceso que lentamente se vino incubando como producto de su propia experiencia existencial. Lo que intento plantear es que una experiencia como la de él, colombo-panameña, inevitablemente le iba a permitir incubar un libro como el que prologo. Así lo estimo porque la sensibilidad que le caracteriza, sazonada con el ingrediente de su lucidez mental, le llevó a incursionar en los mitos, leyendas y ensayos que se han tejido en torno a la relación entre la antigua provincia colombiana (hoy convertida en república) y la nación suramericana poblada de la mejor de las esmeraldas, su gente.
En el libro -el tercero de su autoría- el autor no aspira a centrar cátedra sobre la temática, ni adherirse a escuelas históricas, ni mucho menos elaborar una nueva teoría para comprender el panameñismo o el colombianismo. Al contrario, su objetivo es menos pretensioso y quizás por ello más didáctico para quienes, curiosos, se engolosinarán con el texto. En efecto, de lo que se trata es de realizar un compendio histórico sobre el tema, recoger los aportes que se han  dado sobre la problemática y, con ello, contribuir a superar los subjetivismos con los cuales se ha mirado la cuestión que comentamos y que Don Julio intenta resumir para el lector.
Sin duda el autor toma posición frente a los hechos que describe, pero esa postura  debiera ser comprendida como la propia de un hombre que le duele su colombianismo y panameñidad. Yo creo, sinceramente, que esa es la génesis del texto. Estamos ante un escritor, sensible y acucioso, que no puede permanecer impertérrito ante los “gazapos” históricos que encuentra en uno u otro lado de la frontera colombo-panameña. Por eso el libro es un intento de colocar al lector ante un hecho consumado (la separación de Panamá de Colombia) y las versiones o leyendas (negras o rosas) sobre la naturaleza del acontecimiento que desde hace más de una centuria ha suscitado no pocos polémicas entre colombianos y panameños.
Desde el punto de vista planteado la contribución bibliográfica del Dr. Julio Suárez Matiz se constituye en un proyecto que busca unir, antes que dividir; así como establecer puentes comunicacionales entre dos naciones que en el decimonono e inicios de la vigésima centuria compartieron esperanzas y sinsabores, guerras y remansos de paz, inteligencia y torpezas.
Al final, y como panameño raizal, debo agradecer al Dr. Suárez Matiz, no sólo la amistad y la deferencia de prologar su obra; porque entiendo que ella misma testimonia lo fructífero de estos vínculos colombo-panameños, que si bien antaño generaron tensiones entre los pueblos, a la postre se materializan en una cultura con rasgos compartidos y nos dan la certeza de que con la  convivencia pacífica pavimentamos los senderos de la patria grande, la latinoamerica.
....mpr...

Nota: Puede adquirirse en la siguiente dirección
http://www.amazon.com/s/ref=nb_sb_noss?url=search-alias%3Ddigital-text&field-keywords=Julio+V.+Suarez+M.&x=0&y=0

No hay comentarios:

Publicar un comentario