El archivo
parroquial del templo a Nuestra Señora de Las Mercedes es rico en informaciones
de la gente que mora en Guararé. Hay datos desde 1869 hasta la fecha, lo que
permite reconstruir parte de las genealogías familiares.
Pues bien,
revisando el archivo me encontré con el matrimonio de una ilustre pareja del
Guararé de ayer. Me refiero a las nupcias de doña Aleja del Carmen Espino
Bustamante y el caballero Francisco Castillero Carrión, parejas de esposos cuya
trayectoria de vida merece reconocimiento.
Doña Aleja fue
una esposa de vida proba que sirvió de soporte familiar a los quehaceres
pedagógicos de su esposo, cuyo nombre ha sido inmortalizado al asignárselo al
colegio de la comuna guarareña.
El documento en
comento afirma que la pareja contrajo matrimonio el 8 de abril de 1937, fecha
cuando ella contaba con 20 años y don Francisco 32. Doña Aleja, nacida el 17 de
junio de 1916 y fallecida el 8 de agosto de 2013, era hija de José Antonio
Espino Saavedra (29/V/1859) y María de Jesús Bustamante (10/XII/1882). Por su
parte, Francisco Ignacio Castillero, nacido el 15 de diciembre de 1904, era
hijo de Francisco A. Castillero y Adela María Carrión Barrios (1884-1971).s
datos
Estas
informaciones, breves y sentidas, aportan algunos datos sobre un matrimonio guarareño
que marcó el devenir histórico del municipio y cuyo influjo se extendió más
allá de los límites distritales. A ambos le recordamos con aprecio y gratitud:
a doña Aleja y a don Pancho, que ya gozan del descanso eterno.
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